Dijo Balaguer, para justificar sus múltiples maneras de colocarse por encima de las instituciones: “La Constitución es un pedazo de papel". La frase ha pasado a la historia del sistema político dominicano como paradigmática expresión del irrespeto a la institucionalidad. Pocos sabían que la frase pertenece a Ferdinand Lassalle, socialdemócrata del siglo XIX, que mantuvo unas tensas relaciones con Marx, ora de amistad, ora de enfrentamiento.
En las conclusiones de la conferencia “¿Qué es una constitución” Lassalle sostiene: “Los problemas constitucionales no son, primariamente, problemas de derecho, sino de poder: la verdadera Constitución de un país sólo reside en los factores reales y efectivos de poder que en ese país rigen, y las Constituciones escritas no tienen valor ni son duraderas más que cuando dan expresión fiel a los factores de poder imperantes en la realidad social”.
Este es el mensaje: La aplicación y el respeto o no de la Constitución es una cuestión de poder. Así como hay fuerzas y grupos que empujan para convertir nuestras normas y leyes en papeles siguiendo la nefasta herencia balaguerista y neotrujillista, hay fuerzas y grupos que empujamos para lograr normas y reglas que promuevan la democracia, que se apliquen a todos y a todas de la misma manera y que sean cada vez más equitativas. Necesitamos que las fuerzas de la democracia se unifiquen, para lograr mayor capacidad de presión para que la aplicación de la Constitución favorezca a las mayorías. Debemos ponernos de acuerdo para empujar todos y todas para el mismo lado.
Lassalle termina su conferencia diciendo: “Si no olvidan ustedes esta conferencia, señores, y vuelven a verse alguna vez en el trance de tener que darse a sí mismos una Constitución, espero que sabrán ustedes ya cómo se hacen estas cosas, y que no se limitarán a extender y firmar una hoja de papel, dejando intactas las fuerzas reales que mandan en el país.” Y lo dijo en el 1862.
Ramón Tejada Holguín
Perspectiva Ciudadana
18 de noviembre de 2010
Alicia persigue un conejito blanco por vericuetos inenarrables: en el trayecto descubre un país de maravillas que ella transforma y a ella la transforma. Demandar la construcción de una sociedad democrática es igual: se construye la democracia y el trayecto nos descubre nuevos espacios para la acción colectiva. Alcanzar la meta es el fin del relato, pero el relato social es interminable. Desde el País de Alicia es mi persecución del conejito de la democracia, en este país de ambiguas maravillas.
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Pedazo de Revolución
Recuerdo al presidente del Senado planteando que el artículo 37 no evitará que a las mujeres se les practique un aborto terapéutico, porque el 42 permite que se haga, y no puedo dejar de pensar en Yandi. Según la ginecóloga Lillian Fondeur, Yandi de 20 años, sale embarazada y la situación se la complica una anemia que no cede, con la cual luchó durante 26 semanas en las que hizo lo imposible por salvarse ella y su embarazo. Al final se descubre que la anemia era en realidad Aplasia Medular, enfermedad que en mujeres embarazadas es mortal. Con la Constitución anterior se indicaba un aborto terapéutico, pero hoy, por miedo al artículo 37, en los hospitales ni piensan en la interrupción del embarazo.
Hay un desencuentro olímpico entre los y las ginecólogos(as) del sector público, la Policía Nacional y la Revolución Democrática. Los primeros ven la Constitución actual como la camisa de fuerza que les impide salvar las vidas de mujeres pobres, los segundos se pasan por el forro la Constitución, mientras la Revolución Democrática espera saltar del papel al Palacio Nacional, a los Hospitales, al mundo real. Una buena forma de comenzar a hacerla realidad es sancionando ejemplarmente a los trogloditas, y una comunicación de la SESPAS a los Hospitales recordando que las mujeres pobres también tienen derecho a la vida.
Ramón Tejada Holguín
16 noviembre 2010
El Caribe
Perspectiva Ciudadana
La joven murió, dicen que de la asociación entre Aplastia Medular y embarazo, pero yo sé que fue de artículo 37 asociado con pobreza. Sí, porque de haber tenido recursos sale del país o en una clínica le hacen el aborto terapéutico que pudo salvarle. Murieron ella y el hijo o hija que tanto quería. El artículo 37, que supuestamente defiende la vida, terminó causando la muerte de la madre y el feto.
Escucho Revolución Democrática, y no puedo dejar de pensar en la imagen de un troglodita que intenta arrebatar una sombrilla a un sacerdote jesuita. Son las 10 de una de estas frescas mañanas de noviembre, en las afueras del Palacio Nacional un grupo de personas están de pie, sus sombrillas amarillas abiertas nos permiten leer "4% para educación", entre ellas está Mario Serrano, sacerdote jesuita que dirige el Centro Montalvo. El zafarrancho se arma de repente, policías con violencia y alevosía intentan arrebatar las sombrillas a este grupo de ciudadanos y ciudadanas que cumplieron con todos los requisitos de la ley para estar de pie con sus sombrillas abiertas en los alrededores del Palacio de Gobierno. Una pacífica y original forma de llamar la atención sobre la necesidad de una mejor calidad de la educación pública y un uso más eficiente de los recursos del sector educativo.
Escuché a un vocero policial decir que el caso se está investigando. Parecería que los investigadores no tiene acceso a "Youtube", allí vi claramente al troglodita forcejeando con Mario Serrano, allí vi claramente más de un policía agredir a quienes hacían uso de sus derechos constitucionales, para exigir que se cumpliera con las leyes y la Constitución dominicanas.
Ramón Tejada Holguín
16 noviembre 2010
El Caribe
Perspectiva Ciudadana
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