Hay tiempo para rectificar e iniciar el debate necesario


Esto es lo primero que ven el
niño  y la niña de primaria
cuando abren el texto integrado 

    Dos meses y medio después de iniciado el año escolar el país se enteró que el Ministerio de Educación de la República Dominicana (MINERD) había iniciado la aplicación de nuevos recursos educativos, incluyendo los llamados textos integrados que, según diversos sectores, el MINERD  diseñó, imprimió y rdistribuyó sin que se hayan realizados concursos públicos, ni se tomaran en cuenta a todos los actores del sistema educativo.

En los textos integrados hay ausencias de materias y se observa una redefinición de la filosofía educativa, a pesar de que el Presidente de la República sostuvo que carecemos de filosofía educativa. Revisé el de Primer Grado Volumen l. No tiene Lengua Española como materia, ya que la filosofía que subyace es que se aprende escribiendo y a través de otros conocimientos. Por ejemplo, en la unidad 1 se dice: "Aprenderás a escribir tu nombre, el de tus compañeras y compañeros y las partes de tu cuerpo. Investigarás sobre la forma en que funcionan los sentidos y mostrará tu trabajo en un periódico mural". Pero, el alfabeto, herramienta básica de la escritura, no aparece en este texto.

El primero de diciembre, en el vórtice de la polémica, el MINERD publica un espacio pagado en todos los diarios en donde se revela que el proceso de formación de directores y profesores para el manejo de los textos se hizo en agosto del 2010, y la clases iniciaron el 17 de agosto del mismo año. El Ministro Paredes ha dicho que en enero se continuará enseñando con el Volumen ll de los textos integrados, pero que está abierto al dialogo. Así no es posible el debate, es difícil conversar cuando se le presenta al interlocutor una situación de hecho.

El debate actual sugiere que se tomó una decisión trascendente en términos educativos sin que participaran todos los actores del sistema. La cantidad de quejas, el malestar y las evidencias de que no se maneja correctamente el texto integrado sugieren que se implementó sin entrenar, ni convencer de las bondades de lo nuevo a profesores y directores del sector público. El MINERD debe dar un paso atrás, e iniciar un autentico debate democrático. No es paja de coco lo que se está jugando en estos cambios radicales que se ejecutan.

Ramón Tejada Holguín
Perspectivaciudadana.com
2 de diciembre de 2010



Lo segundo que ven el niño y la niña, antes del índice del Texto Integrado


Oposición, ¿cuál oposición?


El gran masturbador. Salvador Dalí.
Foto realizada con celular
  En teoría los partidos son necesarios para la democracia porque a través de ellos se canaliza la competencia política. Porque la existencia de la oposición impone límites a quienes gobiernan. Porque los conflictos entre los partidos de gobierno y los de la oposición ayudan a establecer las normas y las reglas democráticas. Pero la sociedad dominicana atraviesa por una crisis de representación de los partidos políticos y estos son más que nada "formaciones personalistas", es decir son instrumentos de personas, no de visiones o propuestas de orden social diferentes. Por esa razón las probabilidades de que el enfrentamiento entre ellos ayude a establecer normas y reglas democráticas es reducida.

El caso se agrava si los líderes de la oposición se rascan el ombligo, mientras están preocupados por ser elegidos por el líder gobernante como su interlocutor, dedicando su tiempo a sus luchas intestinas contra los demás líderes partidarios, antes que a presentarse como auténtica opción de gobierno. Los conflictos entre los partidos dominicanos no se presentan como conflictos entre disímiles intereses sociales, o económicos, u opciones de orden social distintas, se presentan como guerritas mediocres entre políticos igualitos que sus guerritas que se han autonomizado de la sociedad y parecen ser autistas. Dicho en otros términos: la competencia política no se realiza de cara a la ciudadanía, o de cara a las bases o en representación de ellas, sino de cara al otro líder. La participación de la ciudadanía es reducida y puntual, por lo que el aislamiento de los políticos se profundiza.

En teoría el conflicto político crea normas democráticas, ya que en el enfrentamiento se crean las reglas para la libre circulación de las propuestas, libre circulación que todos los partidos necesitan, identificándose la necesidad del contrapunto ineludible. Esto ocurre siempre y cuando los partidos entiendan que no pueden eliminar a la oposición sin destruir a la democracia misma, y la ciudadanía sea activa exigiendo que las políticas públicas respondan a sus necesidades. Pero, cuando se entiende que la lucha política es guerra entre ejércitos y que de lo que se trata es de destruir al enemigo, terminan desprestigiados todos los partidos y los mismos líderes. Pocos líderes políticos dominicanos están saliendo de esta trampa.

La democracia demanda la institucionalización de un sistema competitivo de partidos y de una ciudadanía que participe y tome en cuenta la eficiencia y la eficacia de las políticas públicas y los programas propuestos a la hora de votar. Lo que implica luchar contra el caudillismo y la perpetuación de los liderazgos en el poder. La visión del conflicto político como guerra fratricida es lo que está provocando que en el PRD se observe una carnicería como si cientos de Caínes se enfrentaran a un montón de Abeles, sin que nadie pueda decir quiénes son los Caínes, y cuáles los Abeles. Este enfrentamiento le inutiliza como oposición, quedando el PLD a merced de sí mismo, mientras la ciudadanía como colectivo se queda perpleja. Participar es la clave.

Ramón Tejada Holguín
Perspectivaciudadana.com
El Caribe
30 noviembre 2010