¿Qué tan representativos son los datos de la última encuesta de Newlink dada a conocer por Telenoticias el lunes 11 de enero?

El lunes 13 de junio de 2015, hace 7 meses, Newlink publicó una encuesta de preferencia electoral en el periódico El Dinero según la cual la intención de votos del Presidente Medina era de 54.1 %, la de Luis Abinader era de 37.3 %, Guillermo Moreno 7.1 % y Quique Antun 1.5 %.  Como se observa esos candidatos acaparaban el 100 % de los potenciales votantes.

En el día de ayer, 11 de enero, la misma firma encuestadora, da a conocer los resultados de una encuesta de preferencia electoral realizada para Telenoticias, según la cual Abinader ha bajado 3.3 puntos porcentuales, el Presidente ha bajado 7.6 puntos porcentuales, Antun ha subido un poco, Minou Mirabal, que no aparecía en el radar, alcanza 3.7 %, Moreno baja un poco, aparece un 5.2 % que dice ninguno, y un 2.7 % que dice otros.

Es obvio que hay poca consistencia y se hace difícil observar tendencias entre las dos encuestas. Imaginen, la tendencia sería que bajan los principales candidatos, que Antun después de anunciar su apoyo al PRM aparece con unos cuantos puntos, que en 7 meses Minou aparece en el radar, al igual que otros no considerados, y que hace siete meses nadie decía que votaría por ninguno, pero ahora sí.

(El 29 de febrero de 2016 la firma ha realizado una nueva encuesta, en esta el presidente sube de 46.5 % a 50.5 %, mientras que Abinader baja a 32.0 %, Moreno sube a 8.0 % y Minou baja a 2.0 %. Según esta firma parecería que la coyuntura electoral anda en zigzag permanente)

 ¿A qué se debe un cambio tan radical entre las encuestas realizadas por la misma firma encuestadora?

La pregunta es pertinente, máxime cuando precisamente para la misma fecha de la encuesta de Newlink –El Dinero se publicó una encuesta de la Gallup-Hoy según la cual el Presidente tenía un 62.6 % de intención de votos, mientras que Luis Abinader tenía 17.4 %.

El tema es un problema de naturaleza metodológica y una evidencia de que las encuestas telefónicas tienen muy poca representatividad para captar la intención de votos del y la votante dominicano.

Si las elecciones presidenciales fueran hoy, ¿por quién usted votaría?
Si usted desea saber el nivel de satisfacción de las personas que llaman al colmado para pedir servicio a domicilio, lo que debe es tomar los nombres y teléfonos de todos los que llaman al colmado, y luego elegir al azar entre ellos las personas a entrevistar.

Pero, si usted desea saber la intención de votos de la ciudadanía dominicana, lo primero que debe hacer es conocer el padrón electoral. Saber cuantas personas hay en el padrón de los diferentes grupos de edades, cuántas son mujeres, cuántos son hombres, cuántos viven en cada uno de las circunscripciones electorales.

Luego de conocer el padrón electoral muy bien, usted debe buscar una forma de elegir a las personas a entrevistar de manera que la cantidad de personas entrevistadas tenga la misma característica del padrón electoral.

Por ejemplo, si en el padrón electoral hay 50.35 % de mujeres y usted va a hacer una encuesta con 1200 casos, debe entrevistar un 50.35 % de mujeres, y el resto de hombres.  Si el padrón tiene 17.1 % de jóvenes, usted debe entrevistar ese mismo porcentaje de jóvenes que dice el padrón. Si el 15 % del padrón electoral es universitario, en su muestra usted tiene que entrevistar un 15 % de universitarios.

Eso es muy importante para lograr lo que llaman representatividad. Como puede verse, una encuesta de preferencia electoral debe tener claro el perfil sociodemográfico (edad, sexo, residencia, educación) de la persona entrevistada. Por eso, muchas firmas prefieren hacer encuestas cara a cara, para poder tener el control estricto del perfil sociodemográfico de la persona entrevistada.

Pero, NewLink hace las entrevistas vía teléfono residencial, a través de una grabación que hace las preguntas y pide a la persona marcar en el teclado sus opciones de respuestas. La representatividad de las encuestas telefónicas es limitada.

Un principio fundamental para que una encuesta sea representativa es que “todas las personas pertenecientes a una población de estudio tengan la misma probabilidad de ser elegida”.

En las encuestas telefónicas solo tienen probabilidad de ser elegidos, es una obviedad, los hogares que tienen teléfonos. Y las personas que están en los hogares a la hora en que se hace la llamada. O sea, que sería difícil que usted haga una muestra efectiva y eficiente que represente al padrón electoral.

Las encuestas telefónicas por lo tanto no representan a todos y todas los y las votantes del país. Según el censo del 2010 solo el 27.8 % de los hogares tiene teléfono residencial. Además, hay evidencias de que los hogares con teléfono residencial se están reduciendo.

Según la Enhogar para 2011 solo el 22 % de hogares tenía teléfono residencial. Las encuestas telefónicas tienen muy baja representatividad, ya que solo llegan, en el mejor de los casos, a un tercio de los hogares dominicanos.

Además, tienen otro defecto: dentro de los hogares responde cualquier persona que levante el teléfono, por lo cual no se tiene control del perfil demográfico de la persona entrevistada a la hora de hacer la muestra. Puede ser que responda un joven de 16 años, marque las opciones que desee y diga que tiene edad para votar.

Tampoco este método permite la representatividad según grupo socioeconómico, ya que puede ser que responda alguien del servicio doméstico, una persona que está de paso en el hogar y no vota en la ciudad, y responde el cuestionario.

Es decir que el “arreglo” muestral se realiza después de aplicada la encuesta, y no antes, como debería ser, que desde el inicio el encuestador tenga claro la cuota de mujeres, según edad y lugar de residencia y si vota en donde ha sido entrevistada.

Anoche, en el noticiero de Cavada, durante la presentación de los resultados se dijo que se hicieron 11 mil llamadas, pero solo se usaron en la muestra 850, que fueron las que completaron el cuestionario. En otras palabras solo usaron en la muestra el 7.7 % de los hogares que recibieron una llamada. Como se verá en esa “ficha técnica” es imposible calcular el margen de error y el nivel de confianza, dos cálculos vitales para poder evaluar el poder de representación de una encuesta.

En definitiva, la inconsistencia entre las dos encuestas de Newlink se deben a un defecto de diseño de las encuestas telefónicas.


Ramón Tejada Holguín
12 Enero 2015