Las primarias de la discordia: Respuestas ampliadas a tres preguntas de Nicanor Leyba del semanario Clave

Nicanor Leyba: ¿Cree usted que el PRSC se acerca a una nueva ola de división o cree que la posición de Estrella es un simple pataleo en el que se quedará sólo?

Ramón Tejada Holguín: Todo parece indicar que con la victoria de Amable el PRSC no saldrá ileso. Las características del liderazgo de Amable difieren substancialmente del discurso político que Eduardo Estrella le presenta a la ciudadanía.

Estrella ha dicho que desea encabezar una revolución moral en el país, si sus palabras son ciertas su renuncia del PRSC y la de quienes le siguen es inminente. Aristy Castro es el más descarnado de los políticos clientelares del país, que ve como normal lanzar billetes desde helicópteros, y carece de una propuesta política. Es el típico cacique que sólo puede desarrollar en el contexto de sociedades pobres y con escasos desarrollos institucionales, que se aprovecha de la pobreza de las personas para comprar lealtad política.

En conclusión, si Estrella desea seguir vigente en la política y mantener creíble el discurso sobre la “revolución moral” debe renunciar. Así como a Danilo Medina se le hace difícil sumarse al proyecto reeleccionista luego de satanizar la reelección, para Eduardo Estrella apoyar a Amable debe ser como tomarse la cicuta.

Nicanor Leyba: ¿Cuáles serían las consecuencias para ese partido si vuelve a dividirse?

Ramón Tejada Holguín: Con el triunfo de Amable Aristy Castro el PRSC se consolidad como el partido más clientelista del sistema político dominicano. Se muestra como un instrumento para lograr beneficio un puñado de dirigentes. Seguirá en picada como partido, pero quienes tienen el control del aparato tendrán pingüe beneficios.


Nicanor Leyba: ¿Le ve algún tipo de posibilidad a que se logre conformar un frente con líderes tan disímiles como Milagros Ortiz, Hatuey De Camps, Danilo Medina, Eduardo Estrella?

Ramón Tejada Holguín: Hay muchos bemoles y preguntas en esto y no se puede dar una respuesta fácil. Soy de los escépticos. Tomemos en cuenta que en el 2008 las elecciones son presidenciales, y en el contexto de elecciones separadas no hay premios de consolación. No es posible que estos dirigentes se repartan cargos electivos. Es todo o nada. En ese sentido un bloque de esta magnitud es impensable como bloque coyuntural, sólo tiene sentido si se piensa como una estrategia de largo plazo, es decir como partido político.

Si creemos que el objetivo de juntarse es sólo ganar la presidencia, respondamos las siguientes preguntas: ¿hay tiempo para articular una buena oferta electoral? ¿De dónde saldrán los recursos? ¿Quién seria el candidato o candidata a la presidencia y quien a la vicepresidencia? ¿Cuáles serían las bases para esa formación? ¿De dónde saldría el financiamiento de la campaña? ¿Estarían dispuestos Milagros y Danilo a ir bajo la bandera del PRSD de Hatuey De Camps y fortalecer así esta opción política, al margen de sus proyectos personales? En caso contrario, ¿cuál sería el partido con reconocimiento en la JCE que llevaría la candidatura? Como se ve, responder estas cuestiones no es muy fácil. Si cada uno de ellos se va de su partido por no haber ganado la candidatura, ¿por qué estarían dispuesto a cederla al otro u otra que viene de un partido distinto?

Si se juntan y no pasan a segunda vuelta. ¿A quién apoyaran? Estrella rechazará apoyar al PRSC, Milagros al PRD y Danilo al PLD.

Obviamente tomando en cuenta estas preguntas, resulta impensable que una agrupación de estos tres dirigentes se articule como organización coyuntural para ganar la presidencia.

Pero la formación de una agrupación política nueva, con estos tres dirigentes como cabezas principales también tiene sus bemoles. Sus tradiciones políticas son distintas, muy distintas, ¿cómo conciliar la socialdemocracia de Milagros, el pragmatismo de Danilo y el conservadurismo de Eduardo Estrella? En el plano de estos tres líderes “alternativos” en sus partidos el discurso es vital, no pueden aparecer en un nuevo agrupamiento desdiciendo lo que han aportado a sus respectivos partidos. Es decir, no podría Eduardo asumirse como socialdemócrata, no podría Milagros decir que se cambió al pragmatismo y Danilo jamás podría ser visto como un hombre de una doctrina en específico.

De todas maneras, esto es especulación, en el país de las maravillas cualquier cosa puede ocurrir.

Ramón Tejada Holguín
14 de junio 2007